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viernes, 30 de diciembre de 2011

Feliz 2012 desde UCAR-Granada


Estimados conciudadanos:

Desde Unidad Cívica Andaluza por la República en Granada (UCAR-Granada) queremos desearos un feliz 2012.

Salud y República Federal, compañeros y amigos.

* Felicitación cortesía del maestro Jota Medina.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

La mala salud de la monarquía


José Manuel Martín Medem


26/12/2011

¿Qué significa la foto sobre la mesita del fondo, durante el mensaje del rey, en la que Juan Carlos está escoltado por el presidente del PP y el secretario general del PSOE? ¿Van a un gobierno de coalición o hacia una manera todavía más bipartidista de gobernar para romper definitivamente el pacto de la transición y garantizar la continuidad de la monarquía? 

En aquel pacto ofrecieron una democracia controlada y un poco de bienestar a cambio de la impunidad para el franquismo y para los negocios de la nueva oligarquía. No lo cumplieron (ley electoral, dominación de los medios de comunicación, concentración del poder económico y dependencia de Estados Unidos) y ahora lo rompen para imponer el golpismo financiero que ya ha violado la Constitución y va a cambiar el modelo de Estado mientras destruye la escasa protección social que tanto nos había costado conseguir. 

Dice el rey en su mensaje de Navidad que su comportamiento debe ser “ejemplar”. No lo fue en el golpe constitucional del 23 de febrero de 1981 y no lo es ahora en el golpe de mercado contra la Constitución. 

Dice también que “la justicia es igual para todos”. No es cierto. El artículo 14 de la Constitución establece que “los españoles son iguales ante la ley” pero el artículo 56 advierte que “la persona del rey no está sujeta a responsabilidad”. 

El mensaje del rey asume (“con sinceridad y realismo”) el proyecto para transformar España (Informe Everis) que hace un año le anunciaron las grandes empresas y los bancos con mayor poder. La oligarquía le explicaba, en su manifiesto golpista (cambiar la Constitución sin pasar por las urnas), que “termina un ciclo y empieza otro que exige cambios estructurales urgentes para modificar el ámbito constitucional e imponer un nuevo modelo de Estado”. Es lo que el rey denomina en su mensaje “un planteamiento global cuyas líneas maestras y medidas concretas corresponde diseñar, desarrollar y aplicar a los responsables políticos y a los agentes económicos y sociales”. Sin contar ni con la voluntad popular ni con la soberanía nacional. 

El Informe Everis exigía a los ciudadanos “capacidad de sacrificio” y el monarca advierte que “la recuperación exigirá sacrificios”. ¿Qué significan esos sacrificios? Lo que ya sabemos: que el más feliz no es sólo el que más tiene sino el que además paga menos impuestos. Los banqueros y los empresarios reclamaban la bendición de la Corona y el rey les anima en su mensaje a “trabajar con rigor y convicción”. 

No es una casualidad que el abogado José Manuel Romero Moreno, encargado por el rey Juan Carlos de investigar el daño que le podían hacer a la Corona los negocios de Urdangarin, sea precisamente el secretario del patronato del Real Instituto Elcano que preside el príncipe Felipe y que se financia con las aportaciones de la gran banca y de las empresas más fuertes. El club de los privilegiados (los mismos del Informe Everis) que orienta las políticas para el golpe de Estado del gran poder contra la democracia. 

El nuevo pacto puede ser el del rey con el poder económico y sus gestores políticos. Si en la transición la monarquía necesitaba un poco de democracia para establecerse, ahora a la oligarquía sólo le sirve el rey si colabora en la operación para imponer una nanodemocracia y un bienestar bonsái. 

Un poco de democracia en la transición para que arrancase la monarquía y ahora menos democracia todavía para su continuidad. Tienen que resolver lo que el rey reconoce cuando dice en su mensaje de Navidad que “me preocupa enormemente la desconfianza que parece estar extendiéndose en algunos sectores de la opinión pública respecto a la credibilidad y prestigio de algunas de nuestras instituciones”. Pero tienen un problema. En el gran poder emerge la opinión de los que consideran que, para que no aumente peligrosamente el desprestigio de la monarquía por el procesamiento y posible condena de Urdangarin, lo mejor es jubilar a Juan Carlos y colocar en el trono al pánfilo Felipe. 

La situación económica no puede mejorar con el golpe de Estado financiero y la salud de la monarquía tampoco a pesar de que el rey presuma de “mi salud, felizmente recuperada”. Dime lo que me niegas y estaré más seguro de lo que me parece. En Zarzuela hay mala salud política y personal. En Moncloa saben que la economía va a reventar. La foto de la que hablaba al principio significaría que en el gran poder piensan que puede llegar a ser necesario un gobierno de coalición (o alguna otra forma de colaboración bipartidista) para desmontar la democracia en beneficio de los negocios y de la sucesión en la monarquía. Sin olvidar que, cuando no le sirva, la derecha política y económica dejará caer a la Corona.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Mi yerno y yo


Hugo Martínez Abarca


25/12/2011

Demos por hecho que el mismo párrafo que en 1994 se refería a Roldán, Mariano Rubio y el resto de ladrones de los que se rodeó Felipe González se refiere en 2011 a Urdangarin y no a Matas, Camps y el resto de ladrones de los que se ha rodeado Mariano Rajoy. Juan Carlos de Borbón podría salir a la calle con una escopeta recortada, disparar contra todo lo que se mueva y volver a palacio por el carril contrario y con 1 gramo de sangre por litro de alcohol y según el artículo 56.3 de la constitución nadie podría juzgarle por ello. Es poco verosímil que haga algo así, pero tampoco podría ser juzgado si hubiera aprendido del que fuera administrador de sus cuentas (lo que en otros casos se llama testaferro) Manuel Prado y Colón de Carvajal, de sus íntimos amigos Javier de la Rosa y Mario Conde o de su yerno, a robar del erario. Ni si fuera verdad que a través de “Manolo Prado” Juan Carlos recibía de la monarquía saudí unos céntimos por cada barril de petróleo que importamos a aquel paraíso democrático.

Que una persona que está judicialmente blindada como Juan Carlos de Borbón diga que la justicia es igual para todos y entendamos que se está refiriendo a que la justicia tratará la corrupción de su familia igual que cualquier otra es una mofa al país (mofa, por cierto, que aplauden hoy PP, PSOE, CiU y Compromis-Q al menos).

Por poner un ejemplo práctico: hace unos días todos los medios de comunicación contaron que fuentes oficiales de la Casa del Rey explicaban que en 2006 la Corona había pedido a un abogado que examinara los chanchullos de Urdangarin y decidieron que lo que había que hacer era conseguirle un sueldo (Telefónica Internacional, que tan pronto emplea a Zaplana como al duque), cerrar el Instituto Noos (sustituyéndolo por una Fundación según unas versiones y sin sustituirlo por nada según las fuentes oficiales de la real Casa: ocurre que de hecho Iñaki lo sustituyó por una Fundación) y mandarle al extranjero, en concreto a Washington. Como no soy abogado, se me deben de escapar matices, pero esto que cuentan fuentes oficiales de la Casa del Rey suena muy parecido a lo que define como encubrimiento el artículo 451 del Código Penal:
Será castigado con la pena de prisión de seis meses a tres años el que, con conocimiento de la comisión de un delito y sin haber intervenido en el mismo como autor o cómplice, interviniere con posterioridad a su ejecución, de alguno de los modos siguientes:
  1. Auxiliando a los autores o cómplices para que se beneficien del provecho, producto o precio del delito, sin ánimo de lucro propio.

  2. Ocultando, alterando o inutilizando el cuerpo, los efectos o los instrumentos de un delito, para impedir su descubrimiento.
No hace falta investigar: haya encubierto o no el rey a Urdangarin según confesión propia… no ha cometido delito de encubrimiento porque es mentira que la justicia es igual para todos: el rey no está sujeto al Código Penal y punto. No hay que recordar que para que Botín no fuera un delincuente los tribunales se inventaron la Doctrina Botín, ni que el indulto a Miguel Montes es sorprendentemente más chapucero que el indulto al banquero Sáenz, ni que desde hace años muchos habíamos escuchado que Urdangarin había sido enviado a Washington porque se estaba pasando en el descaro con sus chanchullos pero nunca nadie lo ha investigado y, de hecho, si ahora lo investigan es porque apareció en el caso Palma Arena: investigaron a Matas y apareció Urdangarin, nunca investigaron directamente a Urdangarin pese a que lo suyo era un clamor (como escribía el otro día Elvira Lindo con sorprendente tino: “si lo sabía yo, es que lo sabía todo el mundo).

En una monarquía la justicia es formalmente desigual para todos. Miente quien diga que justicia es igual para todos. Si lo sabrá Juan Carlos de Borbón.
____________________________
NOTAS AL PIE DEL DISCURSITO:

1.- Sorprende la foto de la mesita con Zapatero y Rajoy unidos por el monarca. ¿Está denunciando el turnismo bipartidista del que es vértice o está pidiendo más unidad del bipartito como hizo el año pasado con la selección de fútbol?

2.- En 2010 Juan Carlos de Borbón sólo dijo del terrorismo que “es una lacra que debe desaparecer“. La lacra ya ha desaparecido: ya no habrá terrorismo. Pero el discurso del rey tiene por objeto aparentar neutralidad en lo que es un discurso de parte. Así que sin hacer mención a que por fin nadie va a ser asesinado, secuestrado ni amenazado ni nada por ETA cambia de discurso y, al mayororejense modo eleva el listón: “los terroristas tienen que entregar las armas y desaparecer“. No hay alegría por el triunfo de este año sino sólo nuevas exigencias. Eso no es neutro, es parte de un aparato de propaganda inmovilista.

3.- ¿”La reina y yo“? No: primer discurso de nochebuena sin citar a la reina. ¿Otra que desaparece del Museo de Cera? ¿Cese temporal de la convivencia o el yernísimo está generando una bronca en Zarzuela entre quienes quieren mandarlo a la sala de deportes del museo y quienes se fotografían con él de compras en Washington? Primero sacaron a Marichalar pero como yo no era Marichalar no hice nada, después fueron por Urdangarin, pero como yo no era…

4.- En cuanto pueda reviso quién ganó la porra de ayer y ya lo comentaré por aquí.


* Dibujo de Mena.

sábado, 24 de diciembre de 2011

¿República de derechas o Poder Constituyente?


Javier Parra


19/12/2011

No éramos demasiados – aunque tampoco éramos pocos – , los que hace apenas cinco años planteábamos que llegaría el día en que los llamados “poderes fácticos”, cuando el actual régimen no fuera capaz de satisfacer sus aspiraciones, lo dejarían caer o lo tumbarían, y con él a la propia institución que durante los últimos 36 años ha tenido el carácter de intocable.

Julio Anguita decía en mayo de 2007: ”Puede que mañana tengamos una República de derechas y los nuestros irán como tontos con la banderita”. Pues bien, como no creo que ninguno de nosotros tenga ganas de agitar la banderita de una República de derechas como si fuera tonto, se hace más urgente que nunca abordar con extrema audacia e inteligencia el impulso de un proceso constituyente con capacidad de trascender, de superar procesos endogámicos o repetitivos, de conectar con las más vastas capas de la sociedad a través de los movimientos sociales. Y esto no puede hacerse encerrados en las sedes, y tampoco mirando el futuro republicano con unas gafas del siglo XX, al igual que nuestros predecesores no lo hicieron con unas del siglo XIX. La República es modernidad, cultura y radicalismo democrático, por lo que deberá beber de las aguas que han brotado de las experiencias que en ese sentido se han producido a lo largo de la Historia.

El caso es que las previsiones ya se están cumpliendo y hasta un niño podría percatarse de que esos poderes fácticos, que nada tienen que ver con el régimen de partidos ni con el arco parlamentario - ni con la democracia – ya están dando pasos. Unos pasos gigantes, precisos, estridentes y demoledores que están dinamitando lo que queda de la estructura del Estado y que avanzan, si nada lo impide, hacia la instauración de una República presidencialista, neoliberal, conservadora y con un fuerte aparato represivo.

La realidad es que en apenas 6 meses los llamados “mercados” se han hecho con el control de la Constitución de 1978 y ahora desde un segundo frente – el mediático – han comenzado el asalto a la Jefatura del Estado. Las corruptelas de Urdangarin han facilitado la tarea, es cierto, pero no es menos cierto que los chanchullos eran conocidos desde hace más de cinco años y es ahora cuando están salpicando con su indecencia la actualidad política y social.

En cuatro años la diferencia porcentual entre los partidarios de la Monarquía y la República ha pasado del 47% al 12%, por lo que es previsible que en un plazo muy corto de tiempo haya más republicanos que monárquicos en España. La República está en camino, sólo queda por ver si será impuesta desde arriba o constituida desde abajo. Por supuesto dependerá en gran medida de la capacidad de respuesta – y de propuesta – popular frente a lo que se está imponiendo. No es descabellado que en determinado momento nos digan desde los medios del régimen que con algunas reformas en la Constitución del 78 puede introducirse el modelo republicano y así todos contentos. No habría que tocar la mayor parte del texto, ni la bandera, ni los símbolos, cumpliríamos los objetivos de déficit, y seguro que incluso se conseguiría que algunos salieran como tontos con la banderita. Si creyeramos que esto no es posible es que estamos subestimando al adversario, y eso tampoco sería de ser demasiado inteligentes.

Por tanto, ante el ataque sistemático por parte de los mercados y sus capataces sólo hay una respuesta posible, y es la de la creación de un Poder Constituyente que subvierta de manera democrática incluso las propias instituciones del régimen. Es posible y lo demostraremos.

lunes, 19 de diciembre de 2011

La Casa Real, la impunidad y “Lo que el viento se llevó”


Juan Carlos Monedero


13/12/2011

Lo más llamativo de los más que presuntos desfalcos tramados y ejecutados por Urdangarin con el paraguas de la Casa Real es, una vez más, la impunidad. Qué tendrán algunos, especialmente la aristocracia de cuna, que creen que este país es su cortijo, las personas sus perrunos lacayos y dios y los obispos sus testigos. Desde que nos alcanza la memoria. Desde, cuando menos, los Reyes Católicos. Insaciables señoritos.

La derecha mallorquina lleva años quejándose del enriquecimiento del yerno presunto ladrón, dolida, como siempre, porque no les alcanzaba su cuota parte. Llegado un punto, parece que los reyes ni siquiera reparten entre sus cortesanos. Fue una de las quejas de Javier de la Rosa con el lío de las Torres Kio y los dineros de Kuwait. Ya lo había dicho Talleyrand -recogido por Stefan Zweig en su Fouché-: “Es costumbre real el robar. Pero los Borbones exageran”. El enfado de la derecha, sin embargo, tiene vieja data. Hay una parte, que viene del falangismo, a la que no le gustan los reyes. Otra parte, nostálgica de la CEDA, cree que el nacional-catolicismo se gestiona mejor con una estructura republicana. Otros están simplemente dolidos por el abandono. Hay un lamento de la derecha porque los Borbones se llevan mejor con los socialistas del PSOE que con las diferentes familias del PP. Algún día el PSOE encontrará algún hilo propio. Mientras, sigue desmadejando con paciencia de Ariadna el tapiz trenzado por el franquismo. La alegría que Felipe González tuvo un día con Fraga –hasta lo nombró Jefe de la Oposición para perpetuarlo- es la que tiene el PP con un PSOE al que mueve con soltura de títere. Y como se lleva bien con el Monarca ¿para qué preocuparse de, pongamos por ejemplo, el Estado social?

Que Urdangarin se lo estaba llevando en Mallorca y aledaños era vox populi. De ahí que el Rey, en vez de denunciarlo y ponerle delante de los tribunales, lo invitara a marcharse a la metrópoli, que las penas en la distancia parecen menos. Algo que la madre de la Infanta –que no hay más que una- afeara al licencioso de Juan Carlos, interesado solamente en su cargo, su descendencia inmediata y sus caprichos. La Reina Sofía de Grecia viajó a Washington con el Hola y se dejó fotografiar en esos momentos de tribulación al lado de los cuestionados. Pero hay veces en que ni siquiera llenando la Gran Vía de elefantes puedes ocultar un elefante. Qué no habrá visto el marido de la Infanta Cristina de Borbón en las comidas de Navidad familiares para permitirse el lujo de presuntamente robar con tanto descaro y, además, saber que su esposa iba a verlo todo con entera naturalidad. Pobre Cristina (pobre en términos morales). Cuando estudiaba ciencias políticas en la Complutense miraba con recelo esa pendiente. Pero la carga de la corona vence, parece, cualquier escrúpulo.

Hace años, Jesús Cacho escribió en El Mundo que la corrupción en Madrid era una derivación del quehacer del Rey Juan Carlos, multimillonario y comisionista que, además de recibir dinero público de todos los españoles, no cesa de hacer negocios privados que abultan su cuenta de resultados a cifras escandalosas. El comportamiento del Rey sería la patente de corso para el resto de asuntos que desembocaron en la crisis del ladrillo. No en vano, una buena parte de los amigos del Rey –esos con los que caza- han pasado por la cárcel: los Albertos, Prado y Colón de Carvajal, Mario Conde… No hay que olvidar que su abuelo, Alfonso XIII, perdió la Corona ante la República. Un rey en el exilio es teatralmente enternecedor. Ante una situación penosa, aquel personaje gritó desde la implacable necesidad “A Dios pongo por testigo que no podrán derribarme. Sobreviviré, y cuando todo haya pasado, nunca volveré a pasar hambre, ni yo ni ninguno de los míos. Aunque tenga que mentir, robar, ¡ A Dios pongo por testigo que jamás volveré a pasar hambre !“. Pero ya sabemos que no hablamos ni de la Transición a la democracia ni del rey Juan Carlos, sino de Scarlett O’Hara en “Lo que el viento se llevó”. El viento que se llevó la democracia en 1936.

Dicen algunos que la crisis de la Casa Real se solventa con la abdicación del rey y su sustitución por el príncipe Felipe y consorte. Qué fijación tiene el PSOE con los Borbones. ¿Felipe de Borbón Rey? ¿El que dijo que renunciaba a la luna de miel para luego enterarnos -porque la policía norteamericana les revisó las maletas- que había contratado en secreto un avión para irse a una isla caribeña con sus colegas pijos? ¿El que nunca ha encontrado tiempo para visitar a los trabajadores en ninguna situación dolorosa? ¿El que nunca ha renunciado, aún sin serlo todavía, a vivir a cuerpo de rey?

Hace unos meses, y al calor de la crisis económica, el príncipe Felipe pedía una “segunda transición”. Quizá tenía razón, aunque la que necesitamos es bien diferente a la que el alevín de monarca se desea. Es tiempo de una asamblea constituyente que nos permita encarar la crisis, terminar con una herencia franquista que se ha enquistado en la corrupción política y hacer de la tercera república un lugar de corresponsabilidad ciudadana alejada de las tutelas regias y las imposiciones autoritarias. ¿Nos atrevemos a ser mayores de edad de una maldita vez? Hay películas que están envejeciendo fatal.


*Antecede al texto "La Inmaculada Transición", viñeta del artista pacogarabato.

martes, 13 de diciembre de 2011

Inauguración Blog Vídeos - X Jornadas Republicanas Federales - "República y Derechos Humanos" - UCR


Buenas y republicanas noches, amigos y compañeros:

Después de casi tres semanas desde la clausura de las X Jornadas Republicanas Federales - "República y Derechos Humanos", celebradas en nuestra ciudad los pasados días 25 y 26 de noviembre, os damos a conocer la bitácora que acabamos de poner en marcha con los vídeos íntegros de todas y cada una de las conferencias y charlas que compusieron las mismas:


Inauguramos dicho blog dando las gracias a todos aquellos republicanos que lo han hecho posible: Ana, Andrés, Balta, Carmen, Felipe, Fran, José Luis, JP, Nadim, Pablo, Pepe, Presi, Rafa, Rosa, y seguro que se nos quedan algunos en el tintero...

Sin vuestra colaboración, estas estupendas Jornadas sólo hubieran sido una quimera.

Nos vemos en la lucha por esa otra España posible y necesaria.

Salud y República Federal, amigos y compañeros.

domingo, 11 de diciembre de 2011

Corrupción real. ¿Por qué te callas?


Amadeo Martínez Inglés

Web UCR

05/12/2011

Sí, sí, regio suegro del atlético Urdanga; divino monarca enviado por el Espíritu Santo a este bendito país para velar por la democracia, la felicidad, la salud y el bienestar de sus sufridos ciudadanos; rey sin par que crees provenir del testículo derecho del emperador Carlomagno cuando en realidad lo haces de la pérfida bocamanga del genocida Franco.

Sí, tú, último representante en España de la banda de borrachos, puteros, idiotas, descerebrados, cabrones, ninfómanas, vagos y maleantes que a lo largo de los siglos han conformado la foránea estirpe real borbónica culpable del atraso, la ignorancia, la degradación, la pobreza, el odio y la miseria generalizada de centenares de generaciones de españoles; presunto (estamos en un Estado de derecho aunque no lo parezca) malversador de fondos públicos para pagar francachelas sexuales; corrupto máximo en un país donde, desgraciadamente, la corrupción se mama desde la cuna; impune muñidor de una descomunal fortuna personal que nadie en este país sabe de donde ha salido; vil autogolpista castrense en aquél recordado 23-F que organizaste in extremis para salvaguardar tu detestable corona franquista; fratricida confeso (o presunto asesino) en tu juventud; reo de un delito de alta traición a la nación española al pactar en 1975 con el Departamento de Estado norteamericano, ostentando interinamente la Jefatura del Estado español por enfermedad del dictador Franco, la entrega vergonzante a Marruecos de la totalidad de la antigua provincia española del Sahara Occidental (territorio bajo administración española, según la ONU) en evitación egoísta de una guerra con ese país que hubiera puesto en peligro tu tambaleante corona; corresponsable, en consecuencia, del espantoso genocidio posterior (más de tres mil víctimas) cometido por el rey alauí, Hassan II, para dominar el inmenso territorio abandonado por España... tú que mandas callar a voz en grito a jefes de Estado extranjeros.

¿Por qué callas ahora? ¿Por qué no hablas, y cuanto antes, a los españoles? Primero ¡faltaría más! de las andanzas presuntamente delictivas (los jueces hablarán próximamente) de tu deportivo yerno, ese caradura integral que se ha valido de su matrimonio (con el, seguramente, también delictivo consenso de su gentil esposa) y de la impunidad casi absoluta de que ha gozado hasta ahora la llamada familia real española, para apropiarse de millones de euros del erario público. Con la gentil colaboración de políticos y altos cargos de las derrochadoras y detestables administraciones públicas de este país (central y autonómicas).

Y en segundo lugar, supremo líder de la ya amortizada monarquía franquista del 18 de julio, y ya va siendo hora, háblanos de todas las irregularidades y presuntos delitos cometidos por tu regia persona, algunos de los cuales acabo de señalar y que este humilde mortal (o plebeyo, como quieras) ha denunciado repetidas veces en los últimos años ante las Cortes Españolas, única institución que puede entender de los mismos en base a la absoluta impunidad constitucional de la que gozas gracias a tu amado generalísimo, el tercer dictador más sanguinario de la historia europea después de Hitler y Stalin. Presuntos delitos de los que más tarde o más temprano tendrás que responder ante el pueblo español y que, no te quepa la menor duda, ocuparán algún día páginas y páginas en la triste historia de este país de la modélica transición y gaitas parecidas.

Porque, amigo monarca, ya conoces los populares dichos: "A todo cerdo le llega su San Martín" y "El tiempo coloca a cada uno en su lugar". Y a ti, y a toda tu familia y parentela más o menos cercana de enchufados, vagos y maleantes de toda laya, parece ser que está a punto de llegaros esa suculenta y tradicional onomástica de ancestral raíz gastronómica a la vez que el justiciero "devenir temporal de la historia" os arrincona sádicamente contra vuestro propio latrocinio y contra vuestra y escandalosa corrupción; decidido a bajaros a todos a las negras profundidades del infierno político y social.

El largo tiempo del vino (Vega Sicilia, naturalmente) y las rosas de palacios y lujosas residencias veraniegas (más de siete lustros), gastándoos a espuertas el escaso dinero de los amados y tontorrones súbditos, toca a su fin. Y todos, absolutamente todos los componentes de esa tu despreciable familia real, tendréis que comparecer algún día ante la justicia; unos, como el atlético y descerebrado deportista de elite que creyó que le había tocado la bonoloto cuando la infantita de marras le eligió como dulce esposo de su particular cuento de hadas, muy pronto, porque las pruebas son irrefutables y porque, aunque torpe y lenta, la bella diosa ciega celtibérica de la balanza de oro, no podrá esta vez mirar para otro lado y tendrá que castigar como se merece tanto derroche, tanto latrocinio y tanta vagancia familiar e institucional; otros, como las infantitas borbónicas casadas o separadas temporalmente de sus parejas, que se dejan querer cobrando espectaculares sueldos millonarios de grandes empresas españolas y multinacionales y que, con tribunales o sin ellos, pronto tendrán que renunciar a tanta bicoca; y tú, todavía rey franquista de todos los españoles, aún protegido como estás por la larga mano del dictador y por la nefasta herencia constitucional de unos cuantos pelotas de intramuros del régimen (padres de la patria, qué risa) que parieron una Carta Magna a tu medida haciéndote divino e inviolable... no te confíes demasiado que el horno no está para bollos y muy pronto pintarán bastos en las calles y avenidas de muchas ciudades españolas.

¡Deja ya de hacerte el muerto! ¡Deja ya de emplear medios del Estado (aviones militares y demás) para acudir a grandes premios de Fórmula I o torneos internacionales de tenis a la par que eludes con total desvergüenza las escasas y ridículas obligaciones de tu medieval cargo...y habla! Cuéntanos a los españoles si conocías o no las presuntamente delictivas andanzas de tu todavía yerno, el Urdanga ése, y por qué te hiciste el sueco si, como es de cajón, las conocías. Y, también, nos pones al corriente de a cuanto asciende a día de hoy tu amañada fortunita, de como se desarrollaron (sin entrar en detalles morbosos, desde luego) tus pícaras alegrías amatorias con cargo a los fondos reservados del Estado español, de como transcurrió el tortuoso día (23-F del 81) en el que salvaste a todos los españoles... y de todas las demás guarrerías personales y familiares cometidas en tu ya largo reinado. Así los españoles nos iremos enterando de todo ello sin tener que acudir a Internet y los jueces y los diputados electos del Partido Popular del hoy "muy asustado y mudo Rajoy" podrán ir tomando nota. Para cuando haga falta, naturalmente...

http://www.unidadcivicaporlarepublica.es/index.php/monarquia/casa-irreal/3067-corrupcion-real-ipor-que-te-callas

jueves, 8 de diciembre de 2011

El movimiento 15M como cortafuegos


Alberto Garzón Espinosa*

Pijus Economicus

30/11/2011

La democracia se está desmoronando, pero sin embargo da la sensación de que se mantiene una calma tensa mientras las instituciones democráticas son recortadas y abandonadas a mejor suerte. Los gobiernos elegidos democraticamente son depuestos por sugerir consultas populares y las instituciones europeas dan paso al poder autoritario de dos únicos países, Francia y Alemania. Las conquistas sociales están siendo arrebatadas con mayor velocidad que nunca y hay un sentimiento de “conmoción social” que se adapta perfectamente al proceso descrito por Naomi Klein en “La doctrina del shock”.

Probablemente estamos viviendo un cambio de época, poco perceptible porque los seres humanos tenemos la mala costumbre de no inscribir los fenómenos sociales en una perspectiva histórica completa. Día a día la base de nuestro sistema político y económico se retuerce y los importantes sobresaltos que observamos son analizados únicamente con el criterio de la espontaneidad. No obstante, estoy convencido de que estamos en mitad de un proceso rupturista. La duda estriba en que no sabemos hacia dónde vamos.

El pasado abril acudí invitado a la Universidad de Granada como ponente en un ciclo de homenaje a Saramago. En nuestra mesa estábamos Carlos Taibo y yo mismo, y reflexionamos públicamente sobre cómo la izquierda no había podido rentabilizar una situación que objetivamente era de insurrección generalizada. El paro, la falta de acceso a la vivienda, la precariedad, el incierto futuro… todo apuntaba a un estallido social. Hablamos (puede escucharse aquí) de que existía una calma tensa que tarde o temprano saltaría por los aires. En realidad faltaba sólo un mes para la gran manifestación del 15 de Mayo, pero nosotros no sabíamos la transcendencia que tendría.

El deber histórico de la izquierda ha sido canalizar la frustración generada por el sistema y convertirla en un elemento de acción política que fuera dirigido hacia un nuevo sistema político y económico. Pero la izquierda no había estado a la altura, y víctima de tantas derrotas en el campo ideológico y político se quedaba contemplando cómo la realidad pasaba de largo. Pero los movimientos sociales, fundamentalmente de izquierdas, supieron organizar una gran manifestación que atrajo a una gran parte de la población que se sentía frustrada. Se estaba canalizando esa rabia, si bien no era la izquierda clásica la que lo hacía. (1)

El problema es que el 15M se nutrió de mucha gente sin cultura política. Mucha gente que estaba frustrada pero que mantenía una actitud poderosamente populista. Como dice Zizek, “el populismo, en última instancia, siempre está sostenido por la frustrada exasperación de la gente común, por el grito de ‘yo no sé lo que pasa, ¡pero ya he tenido bastante! ¡No puedo más, esto debe parar!‘”.

El lema de Democracia Real Ya -”No somos mercancía en manos de políticos y banqueros”- se transformó así en un problema importante para dirigir la frustración en un sentido progresista. Porque la gente que acudía a las asambleas estaba muy cabreada, pero lo estaba sobre todo con el elemento visible (los políticos) y no tanto con el elemento invisible (los banqueros). Este segundo elemento, mucho más importante, era más complejo y más complicado de entender. Por eso muchos nos dedicamos en cuerpo y alma a la formación en las asambleas del 15M, procurando revelar el verdadero origen de la frustración. Horas y horas de charlas y conversaciones en las que tratábamos de convencer de que el político corrupto es un problema pero no el más importante ni el responsable original de la indignación.

Así pues, el elemento de formación política y económica invitaba a dejar a los políticos en segundo lado y centrar la atención en el sistema económico (como hacían la mayoría de puntos con los que DRY salió a la calle). Pero el elemento populista estaba también allí presente, mucho más vulgar y pobre. Y la lucha entre ambos enfoques sigue estando hoy en las calles, en cada asamblea.

La cuestión es que la crisis va para largo. Se están aplicando las reformas que más incrementarán la frustración social, como los recortes en sanidad, educación, el empeoramiento de las condiciones laborales, la reforma de las pensiones y las privatizaciones. Y como el propio K. Polanyi advertía, la desregulación agresiva y los avances ultraliberales son la antesala del fascismo, ya que éste último nace como intento social de protegerse ante los excesos de extender el libre-mercado. La frustración social, de hecho, puede ser más fácilmente canalizada por movimientos populistas y de extrema derecha, los cuales ofrecerán un culpable claro y externo (políticos, inmigrantes, etc.) y ofrecerán soluciones radicales.

Hay que tener presente ese escenario y esa lógica del “doble movimiento” de Polanyi. Y en este escenario, el 15M actúa de cortafuegos ante la subida espectacular de posturas populistas (dentro del partido de derechas por antonomasia, como es el PP; y dentro del nuevo y crecientemente influyente partido populista por definición, UpyD). Cuando la frustración crezca se alimentarán las movilizaciones sociales, y entonces y por suerte el 15M ya estará allí. Por eso veo al 15M no sólo como una universidad popular de reeducación política sino también como cortafuegos del auge populista.

Pero hay riesgos. Si dentro del 15M vence la postura populista, esa que cree que los problemas no son sistémicos y del sistema económico sino que son de otra índole (de “privilegios de la clase política”, de “excesivo gasto público” y “auge de inmigración”), entonces el cortafuegos desaparecerá y se convertirá en un problema.

Mientras tanto, la izquierda tiene que pensar estratégicamente en una gestión política de esa creciente indignación. Porque su propósito sigue siendo el mismo: señalar que la responsabilidad de la indignación está en el propio sistema económico y en determinados actores como el sistema financiero especulativo. Por eso puedo decir que para mí hay tres frentes de lucha en esta enorme guerra, que son las del ámbito sindical, las de la calle y las de las instituciones (donde estamos los políticos de izquierdas). Hay que resistir las agresiones, canalizar la frustración y construir una base social revolucionaria y también hay que plantear un programa estratégico tanto económico como político. Esos son nuestros retos en este cambio de época.

Notas:

(1): En “La estrategia política del 15M“, escrito tras la Asamblea estatal de Democracia Real Ya que tuvo lugar en Málaga en agosto, resumí los hechos acontecidos en la izquierda los meses previos al 15M y ofrecí mi visión del asunto.

http://www.agarzon.net/?p=1215

* Alberto Garzón Espinosa es diputado electo al Congreso por la provincia de Málaga, en representación de Izquierda Unida Los Verdes-Convocatoria por Andalucía: La Izquierda Plural.

martes, 6 de diciembre de 2011

Actualidad del Contrato Social


Rafael Martínez de la Ossa Sáenz-López*


04/12/2011

Es una verdad comunmente aceptada que estamos viviendo tiempos nuevos, llenos de desafios desconocidos ante los cuales tenemos que aplicar soluciones inéditas. La crisis política y económica, la degradación medioambiental, el rápido incremento de los hambrientos y pobres, la cada vez más agudizada desigualdad entre seres humanos, la falta de valores en la cultura hegemónica, etc. poseen características claramente diferenciadas de otros momentos históricos. Y, sin embargo, no deja de sonar en mi mente, a modo de ondas que rebotan y rebotan, aquella famosa frase del Eclesiastés: nada nuevo bajo el sol. ¿Tan genuinas y únicas son las curcunstancias actuales?

Buscando alguna respuesta, dándole vueltas a mi cabeza, encuentro perdido entre varios tomos de mi librería, un viejo ejemplar de El Contrato Social, de Rousseau. No, no es una lectura fácil, y no era mi intención ponerme a consagrar toda mi tarde a su estudio. Pero, quiera la casualidad o no, había un par de marcas, puestas en otro momento, que parecían estar esperando a que alguien pasase por ahí. Abro la primera, y hallo un pasaje subrayado a lápiz en el que dice que “(la aristocracia) es el orden mejor y más natural aquel por el cual los más sabios gobiernan a la multitud, cuando se está seguro que la gobiernan en provecho de ella y no para bien propio” y más tarde “exige algunas virtudes (…) la moderación en los ricos y la conformidad en los pobres”. Con gran perplejidad, continúo pasando las páginas, hasta llegar a la segunda marca. Cito textualmente: “Tan pronto como el servicio público deja de ser el principal asunto de los ciudadanos y prefieren servir con su bolsillo a hacerlo con su persona, el Estado se halla próximo a su ruina. (…) A fuerza de pereza y de dinero consiguen tener soldados para avasallar a la patria y representantes para venderla” y a continuación “El pueblo inglés piensa que es libre y se engaña: lo es solamente durante la elección de los miembros del Parlamento: tan pronto como éstos son elegidos, vuelve a ser esclavo, no es nada. El uso que hace de su libertad en los cortos momentos que la disfruta es tal, que bien merece perderla.”.

Con una sonrisa, no dejan de invadirme los múltiples paralelismos y similitudes con el presente, y al re-encontrarme con el pensamiento roussoniano noto que ese legado intelectual, que vertebra y dignifica a nuestro discurso republicano de hoy, que llena las calles del Mundo con profunda indignación y rabia, es más actual que nunca.

http://mastempranoquetarde.wordpress.com/2011/12/04/actualidad-del-contrato-social/

* Rafael Martínez de la Ossa Sáenz-López es médico interno residente y socio de UCAR-Granada.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Sepulcro de la Santa Transición


Daniel Serrano

Diario Abierto

13/10/2011

Señoras, señores, la Santa Transición puede darse definitivamente por amortizada, delenda est, se acabó lo que se daba, los Alcántara se han afeitado el bigote, la Constitución que fue de todos ha sido objeto de estupro bipartidista y catalanes, vascos y los últimos comunistas que nos quedan ya no juegan al consenso que cimentaron Carrillo, Peces Barba, Suárez, Fraga y Pujol a fuerza de inmensas cantidades de tabaco negro e indigestiones de boquerón frito en las tabernas cercanas a la Carrera de San Jerónimo, cuando aún las tabernas alfombraban sus suelos con cabezas de gamba y serrín, qué tiempos. Distinguidas damas, caballeros, la Santa Transición y las reglas emanadas de tal periodo histórico ya no nos valen, el Estado del Bienestar en miniatura del que hemos disfrutado hay que empeñarlo para pagar a los bancos, y luego todo eso del heroísmo generalizado y lo bien que lo pasamos y las proezas sexuales de Fernando Sánchez Dragó, bueno, en fin, pongamos todo ello en cuestión.

Juan Carlos Monedero ha hecho exactamente eso en La Transición contada a nuestros padres. Nocturno de la democracia española. Juan Carlos Monedero, un tanto harto (como tantos), del discurso oficial sobre la Transición, ha escrito un excelente ensayo en el que coloca patas arriba todo lo dicho hasta ahora. O sea, que la Transición (sostiene Monedero) ni fue tan modélica ni tan hermosa ni tan pacífica.

Monedero opina que la democracia española se construyó tras la muerte de Franco sobre un exceso de cesiones por parte de la izquierda y ello ha cronificado graves carencias democráticas y, por ejemplo, ha supuesto que en España la Iglesia católica tenga un peso político que no tiene en ninguna otra parte de la Europa civilizada, que la derecha de este país se haya lanzado al revisionismo profranquista o que la mera pretensión de desenterrar al abuelo rojo enterrado en una cuneta haya provocado polémicas fuera de lugar.

Monedero argumenta hábilmente y echa mano de datos y jugosas citas; recomiendo especialmente el capítulo 4, donde se nos cuenta la Transición mediante lo dicho textualmente por sus protagonistas y lo dicho, a veces, es de aúpa.

La edición incluye, además, numerosas viñetas que ponen de manifiesto que la Santa Transición fue una Edad Dorada del humorismo español. (Un ejemplo: viñeta que muestra a Carrillo en un mitin haciendo alarde de moderación y consenso y mano abierta a amigos y enemigos. Brama Carrillo: ¡Sí a la monarquía, sí a la bandera, sí a la Iglesia, sí a las bases, sí a la unidad de la patria! Y le replica un espontáneo: ¡Macho, deja algo para Fraga!).

En fin, rastreen en busca de esta Transición contada a nuestros padres y lean con atención y, que conste, no siempre coincidirán con Monedero pero viene muy bien algo de disenso entre tanta grisura editorial.

Monedero por un lado, la Santa Transición revisada, el lado oscuro, pero también hay otra Transición. La de los verdaderos héroes, la de quienes pelearon y a los que debemos tanto. El contrapunto a Monedero lo tienen en Nadie pudo con ellos de Nativel Preciado, dibujo del antifranquismo ejercido por obreros de fiereza indomable, por curas convertidos al marxismo, por estudiantes universitarios iluminados por la Escuela de Frankfurt. Josefina Samper, la compañera eterna de Marcelino Camacho, es protagonista de este libro pero no sólo ella. Está Ruano y el menos conocido Felipe Reyero, que también voló a través de una ventana en la siniestra DGS, y el periodista Martínez Soler secuestrado y torturado por un comando fascista y la portada del número 6 de Interviú, sin desnudo y con jersey de cuello cisne, fotografía a toda página del líder de las Comisiones Obreras que socavaban la autoridad de Franco y los suyos. Un relato de resistencia ejecutado con la precisión y buen pulso que caracteriza a una periodista curtida en mil batallas como es Nativel Preciado.

En fin, que la Santa Transición ha muerto y ahora toca diseccionarla y, a la vez, mirar al futuro y pelear en medio de esta hecatombe a la que llamamos crisis. Pelear por un mundo mejor. Como siempre.

(Y a quienes –con Marie Slim Browning a la cabeza, estoy seguro- despotriquen porque esta semana no se hable aquí de literatura pura y dura, denme tiempo, diantres, que la última de Franzen no se lee en dos sentadas y ya veremos si es la Gran Novela Americana que quita el pecado del mundo o qué demonios. Aguarden noticias).

La Transición contada a nuestros padres. Nocturno de la democracia española. Juan Carlos Monedero. Los Libros de la Catarata. 230 páginas.

Nadie pudo con ellos. Toda una vida luchando por los derechos y la libertad. Nativel Preciado. Espasa. 203 páginas.


* En la imagen, el autor del texto, el periodista Daniel Serrano Morón.

viernes, 2 de diciembre de 2011

Política del dolor y lógica de resistencia


Manuel Monereo y Ramón Pérez

Socialismo 21

30/11/2011

Las elecciones generales del 20-N han dado de sí todo lo que podía esperarse de ellas y lo más sorprendente es que las encuestas previas se han cumplido en altísimo grado. Podríamos sacar tres grandes conclusiones de estas elecciones:

Pierde el PSOE, no gana el PP. Es decir, se ha votado en negativo, más que en positivo, como en tantos lugares de la Unión Europea. Rajoy no convence, pero vence, ante el enorme descrédito de los resultados económicos que han provocado las políticas aplicadas por el Gobierno de Zapatero (que dicho sea de paso, ahora Rajoy se apresta a profundizar).

Se constata la separación creciente entre el discurso y las prácticas de la clase política y las aspiraciones y demandas de la ciudadanía. Ante el 'cierre' del sistema político y la identificación cada vez mayor entre las grandes opciones, características del bipartidismo, la gente vota en función de lo posible y escoge lo que aparentemente es el mal menor, aceptando que no hay alternativa y asumiendo que una gran parte de ellos van a pagar los costes.

Estas elecciones han sido fundacionales: inauguran el tránsito a un nuevo régimen político de facto que ya no se corresponderá con los pactos políticos, económicos y sociales que dieron lugar a la Constitución de 1978. La composición del Congreso también recuerda tiempos lejanos con la incorporación de los siete diputados de Amaiur o los once de Izquierda Unida.

La ciudadanía española no es tonta ni inocente; es muy posible que esté bastante desinformada. No obstante, la alta aceptación del movimiento de los indignados y las encuestas recientes de Metroscopia ponen de manifiesto que una clarísima mayoría de españolas y españoles sabe que vivimos en un Estado de excepción impuesto por los poderes económicos; el 72% piensa que vivimos una dictadura de los mercados. Para decirlo con más claridad: la ciudadanía sabe que el auténtico soberano es el poder económico-financiero y que ante él, el soberano formal es eso; lo que consta en un papel.

Hace unos meses Paul Krugman hablaba de las políticas del dolor como aquellas que estaban poniendo en práctica los Gobiernos al servicio del capital internacional. Políticas que limitan los derechos sociales y sindicales, aumentan los sufrimientos de las personas y ponen en disposición del empresario una fuerza del trabajo amenazada por el paro y disciplinada sin derechos. Es lo que podríamos denominar el uso alternativo de la crisis por el capital y desde ello cambiar las relaciones sociales y económicas para imponer un nuevo modelo antidemocráticamente. No hay que irse muy lejos: los recientes cambios constitucionales, con nocturnidad y alevosía, prueban muy bien dónde estamos y qué situación extraordinaria vivimos. Cuando no se acatan siquiera las formas, se está completamente fuera del orden democrático.

Ante esto, lo único que cabe hacer en serio es refundar la izquierda en su conjunto para organizar la resistencia y poner en pie la alternativa a los poderes de la minoría dominante. Lo que esto significa no es muy difícil de entender y de explicar.

Lo primero y fundamental es decir la verdad y decirla clara. Estamos en un Estado de Excepción formalmente democrático y sin que exista un proceso constituyente. Como decía Fontana, este capitalismo ha conseguido mucho más y por otros medios que el viejo fascismo.

Lo segundo es establecer un programa claro para la acción, sin eufemismos, definiendo con claridad programática quiénes son los aliados y analizando con toda precisión quiénes son los enemigos, identificándolos y poniéndoles cara. En realidad, son los mismos que se reunieron con Zapatero, los del IBEX-35, y le dijeron lo que tenía que hacer, con las consecuencias que se conocen: un millón más de desempleados en un año.

Lo tercero es organizar un amplio movimiento que algunos de nosotros hemos denominado M3R (Movimiento por la Tercera República), basado en la soberanía popular y en el poder constituyente de la ciudadanía y con objetivos claros: democracia económica, democracia social y democracia cultural, que pongan fin al despotismo de los poderes que de hecho dominan hoy el Estado español.

Podrá parecer que todo esto es pura verbalidad, cuando no sacar los pies del plato. Nosotros no lo creemos así. Lo utópico, lo quimérico, es pensar que se pueden mantener nuestros derechos y nuestras libertades conquistadas en el marco de un nuevo régimen en gestación que cabría denominar como democracia oligárquica. Para defender la libertad hace falta desarrollar nuestros derechos y nuestras libertades. Esa sería la lógica de la resistencia frente a la política del dolor.

http://socialismo21.net/index.php/home/1144-politica-del-dolor-y-logica-de-resistencia